Esta técnica consiste en la implantación de un material biocompatible en determinados puntos y trayectos definidos de la región labial.
Al igual que en el caso de relleno de arrugas, existen técnicas semi-permanentes o definitivas pero, en cualquiera de los casos, en la Clínica proporcionamos un resultado natural (existen unas proporciones estéticas que siempre hay que respetar) valorando el arco de cupido, columelas, perfil labial, comisuras, código de barras de labio superior, etc.
Estos resultados deben obtenerse progresivamente, es decir, corrigiendo poco a poco y lo habitual es que sean suficientes una o dos sesiones para terminar el tratamiento satisfactoriamente.